jueves, 9 de junio de 2016

sábado, 4 de junio de 2016

CASTELLAR DE LA FRONTERA

Casi 2 horas de autobús y más fresquito de la cuenta llegamos al Nuevo Castellar de La Frontera. Pero después de un desayuno andaluz, rebaná de aceite y manteca colorá, y un rato al sol con viento entramos en calor. Otra vez  al autobús para llegar al castillo de Castellar de la Frontera.
 
La ruta de hoy transcurre en  Castellar de la Frontera, municipio de la provincia de Cádiz.   El núcleo urbano está situado en el interior de una fortaleza medieval, encerrado en las murallas de un castillo, un enclave mágico. Las vistas panorámicas del Parque Natural Los Arconocales, Campo de Gibraltar y el Estrecho son espectaculares. Ocupa una posición estratégica, donde se une el Atlántico con el Mediterráneo y, casi, Europa con África.


La mayor parte del término municipal está dentro del Parque Natural Los Alcornocales, uno de los más grandes de España.



Nuestra visita comienza en el castillo  de Castellar Viejo que se alza sobre un cerro de empinadas laderas, el Cerro del Castillo, entre los ríos Guadarranque y Hozgarganta, divisando el embalse de Guadarranque, así como Gibraltar y el Estrecho.


 
Como su nombre indica,  esta fortaleza árabe construida en el siglo XIII se encontraba en una posición de frontera, defendiendo el reino de Taifa de Algeciras. Fue antigua residencia de los Condes de Castellar.
 

.En 1973 fue declarado monumento histórico-artístico.



Su planta es de forma irregular y posee un recinto amurallado, donde destacan las dos torres  de su entrada con barbacanas y saeteras como elementos defensivos.



Desde el pequeño patio de armas se accede al interior, entre los edificios destacan el Alcázar de los Condes de Castellar, con la Torre  del Homenaje, el Ayuntamiento y la Iglesia del Divino Salvador.



El pueblecito que hay dentro del castillo es el Pueblo Viejo de Castellar de la Frontera; está formado por casas blancas y calles estrechas y sinuosas cuajadas de flores.










Uno de los aprovechamientos más destacables en el Parque Natural Los Alcornocales es su producción de corcho.



 
 
Una vez en la fortaleza averiguamos por qué se construían en estas localizaciones, desde aquí se denomina Sierra Bermeja, casi todo el Estrecho y gran parte del Campo Gibraltar.
 




El castillo esta rodeado por una muralla, en la que se localizan nueve torres de flanqueo para defender los ángulos muertos.




  
 
Dejamos atrás la fortaleza para iniciar la bajada por el sendero SL-A-115 La Calzada - Dehesa del Boyal hasta la Venta  Jarandilla.  Este sendero tiene una longitud  de 5.2 km y transcurre por la finca Boyal, único lugar donde la propiedad es del común de los vecinos.


 
Para acceder al Castillo de Castelar se construyeron calzadas empedradas como la que recorre este sendero. Transcurre por un camino medieval empedrado que se le conoce como "Calzada Romana" con una longitud de 1.3 km.



 
Desde el mirador vemos  el Nuevo Pueblo de Castellar de la Frontera. A finales de los 60, el Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario comenzó a construir a 8 km de la villa fortaleza un nuevo pueblo.


 

 
La vegetación  que encontramos  es la mediterránea, que se caracteriza por su adaptación a la severa y prolongada sequía estival. Destaca el matorral  formado por tojos, lentiscos, jaras, lavandas, palmitos, acebos  y chumberas.






Pero si algo destaca en nuestro recorrido es el bosque  autóctono mediterráneo. Es el bosque de alcornoques, el más extenso de España y uno de los más grandes del mundo. También lo acompañan quejigos y acebuches.



Una breve parada para  beber vino dulce con Montilla de la bota de Salvador.  Bendita mezcla que reaviva los cuerpos.




A partir de aquí, el camino sigue por  la carretera hasta llegar a la Venta Jarandilla, donde disfrutamos de unas cervezas y un rato de tertulia.



En el llano que hay en la Venta Jarandilla nos hacemos nuestra fotografía de grupo con el castillo de Castellar de la Frontera como fondo.



Pero nuestra ruta no  se acaba aquí y seguimos por el  puente que cruza el río Guadarranque, que conduce al mirador del Embalse de Guadarranque.


 Este embalse recoge las aguas del río Guadarranque que nace en el monte de Castellar, a escasa distancia de la ciudad de Castellar Viejo.



 Aquí la vegetación cambia, es de ribera.

 
Es un  paseo llano y agradable de 4km (ida y vuelta).


 
 .Con una temperatura de 24º damos por finalizada  la ruta de hoy y nos vamos a almorzar al Nuevo Castellar, que nos lo hemos ganado.



 
Monumento al caballo en el Nuevo Castellar.


Para la vuelta pasamos por Ojén y nos sorprende ver como la naturaleza se sobrepone, poco a poco, a los grandes incendios que provocan los hombres.
 
Próxima salida sábado 18 de junio, a las 8 de la mañana.
 
 
 

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